Zipi y Zape y la isla del Capitán: reflexión acerca del castigo

Título de la película: Zipi y Zape y la isla del Capitán
Director: Oskar Santos

pixabay.com

Aunque no acostumbro escribir reseñas cinematográficas, al ver esta película hace ya varias semanas con mis sobrinas, me pareció que valía la pena comentarla. También estoy consciente de que no es una película que acaba de salir en el ciné (la vi en Netflix) pero el objetivo de este blog no es hablar de lo que se estrena sino de lo que nos puede llevar a reflexionar sobre la educación y ayudarnos a incentivarla, mejorarla o por lo menos abrir nuestras mentes y aceptar que no existe una sola verdad sino muchas formas de explorar el mundo.

Bueno, acabado este preámbulo, hablemos de la película.

Si quiero comentarla es porque me divertí mucho viéndola y mis sobrinas también. De verdad es una película para ver en familia, gusta tanto a niños como a adultos. Además de la parte fantasiosa y divertida, lo que me gustó es que también provoca ciertas dudas y cuestionamientos. Mi sobrina más chica me preguntaba: ¿ella es mala? Hablando de la señorita Pam, la protagonista que recibe a una familia en su hogar para niños.

Para entender bien la pregunta, aquí les va una pequeña sinopsis:

Zipi y Zape son hermanos, acaban de hacer una travesura con lo cual el papá, en vez de celebrar Navidad en casa, se los lleva junto con su esposa a una isla donde va a entrevistarse con un editor. Sin embargo, al llegar a la isla, la familia se pierde y dan con una mansión en la cual viven la señorita Pam (la dueña) junto con sus niños "perdidos". Además, ahí viven unos personajes extraños que la ayudan a mantener el lugar limpio y a educar a los niños. La familia se queda a dormir en la mansión, pero al día siguente, la señorita Pam les dice a los niños que sus papás los abandonaron. Muy pronto, Zipi y Zape descubren  que no es así: la señorita Pam transformó a sus papás en niños. A pesar de que al principio se quejaban de sus papás, los dos hermanos no dudarán en hacer lo que sea para tenerlos de regreso (es decir a su edad adulta). 

pexels.com

                                       

La señorita Pam, tiene el complejo de Peter Pan, no quiere ser adulta. También cree que los papás no deberían castigar a los niños ni ponerles límites. Zipi y Zape sin embargo, quieren tener a sus papás aunque éstos los habían dejado sin Navidad por haber provocado un incendio. De ahí la pregunta de mi sobrina, la señorita Pam cree hacerles un favor a los niños transformando a sus papás en niños pero no se preocupa por saber si esto es lo que quieren. 

Después de ver la película, los papás pueden platicar de forma muy amena con sus hijos acerca de qué les pareció la actitud de los protagonistas, pueden preguntar qué hubieran hecho ellos en el lugar de Zipi y Zape; si están de acuerdo con la idea de la señorita Pam de que no hay que ponerles límites a los niños. 

Si aún no la han visto, espero tengan oportunidad de verla.